Es difícil comenzar este párrafo sin recordar cada uno de los momentos tan difíciles que ha vivido en estos momentos nuestra ciudad, lo que nos conlleva a un profundo momento de reflexión., han sido numerosos los momentos de tensión de incertidumbre y desasosiego, el miedo que se apodera de nuestra humanidad y la desesperanza, hemos visto jóvenes enfrentados frente al gobierno y sus instituciones movidos por sus pensamientos e ideales de lucha, frente a su cansancio por las dificultades y la falta de oportunidad, trato de ser un poco superficial frente a los temas que los enfrentan puesto que el debate es extenso y profundo y creo que data de años y años de historia, de política, religión, juicio y pensamiento enfrentados.
Sumemos a todo lo anterior narrado la actual pandemia del covid-19, enfermedad que ha doblegado en muchos sentidos a la humanidad, pero que ha propiciado el mejor momento de reflexión en el ser humano con su interior, con su espiritualidad.
Como caleños es de vital importancia el llamado a la oración, a la plegaria, independientemente, de nuestra convicción política.
Han sido muchos jóvenes que han perdido la vida en medio de los enfrentamientos y las constantes protestas, los bloqueos y los saqueos han dejado también un gran numero de victimas, personas en las clínicas a las cuales no les llegaron medicamentos, lugares en los cuales la zozobra y el miedo cobro sus victimas.
!padre celestial!
elevamos nuestra oración a ti, para que seas tu tomando el control de nuestra ciudad y de cada una de las personas que en ella habitan, que el poder de tu espíritu santo sea obrando en cada uno de los corazones, y que seas tu quitando todo deseo de venganza, de violencia, de muerte, llena con el poder de tu espíritu, a nuestra ciudad, a nuestra nación.
trae señor tiempos de paz y de refrigerio a cada persona, que seas tu señor moviéndote de manera gloriosa en cada corazón, que la luz de Jesús alumbre nuestros corazones.
Te lo pedimos en el nombre del padre, del hijo y del espíritu santo.
DECLARAMOS QUE NUESTRA CIUDAD Y NUESTRA NACIÓN ES DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO
AMEN